Vivimos rodeados de marcas. Marcas que condicionan nuestra percepción de productos y servicios, que nos inspiran o nos repugnan, que tratan de seducirnos y conquistarnos. Señuelos sofisticados diseñados con mimo para activar los resortes oportunos.
En fin, no pretendo teorizar en exceso sobre el concepto de marca. Lo que sí me parece curioso es que tampoco el branding, esto es, el arte de generar y gestionar marcas, pueda escapar a los nuevos tiempos. ¿O acaso puede huir de la portentosa capacidad para compartir y colaborar que nos brindan las nuevas tecnologías?
Un par de experimentos curiosos sobre el tema para quien quiera curiosear: Democreatedtm Brand y Spoonch.
Escuchando: Incurable – Piano Magic